Blog · Recetas · recetas saladas · Todas las recetas

Palitos de queso.

Pues lo prometido es deuda, aquí desde la novela «La pequeña panadería de la isla», os traigo algo para picar, unos palitos de queso que son perfectos para sacar en un aperitivo.


Dificultad: Fácil (solo es mezclar todo bien).

Ingredientes:

  • 110 gr. de mantequilla blanda.
  • 200 gr. de queso rallado cheddar curado (no uses ningún queso tierno ni tipo azul).
  • 200 gr. de harina normal.
  • 1 cucharadita de sal.
  • 1 cucharadita de levadura en polvo.
  • Pimienta al gusto.

Ponemos el horno a precalentar a 200º.

Mezclamos bien el queso y la mantequilla.

A continuación, añadimos la harina, la sal, la pimienta y la levadura. Mezclamos bien hasta que quede todo bien integrado.

Vamos cortando masa y formando palitos, no muy gruesos porque de lo contrario saldrán un poco apelmazados.

Los vamos colocando en una bandeja de horno forrada con papel de hornear.

Los metemos al horno y los dejamos unos 15 minutos o hasta que estén crujientes y un poco doraditos.

 

Anuncio publicitario
Blog · relatos · reseña de libros

Algo para picar…

Y continuamos con nuestra novela «La pequeña panadería de la isla», y de ella haremos una recetilla ideal para poner con algún aperitivo y quedar fenomenal.


Nos ponemos en situación…

Polly pasó un día fantástico con Tarnie, y se quedaba ensimismada pensando en ello. Pero ahora tenía que bajar a la tierra y ponerse manos a la obra en su obrador que le va viento en popa. El pan con miel aun la gente es un poco reacia a probarlo, pero está segura que es por falta de información gustativa. Mientras, vuelve a preparar unos palitos de pan aderezados con queso que están teniendo un éxito rotundo.

Esto sí que la hace realmente feliz, aunque suponga mucho trabajo para una persona sola, pero es su gran entusiasmo la que hace que siga para delante. Atrás quedaron esas charlas interminables con Chris sobre posibles contratos, intentando lidiar con los constantes cambios de un millón de formas, discusiones de posibles encargos… Aquí todo era distinto, «…si la gente quería un bollo compraba un bollo, si la gente quería pan compraba pan. Si no querían no lo compraban. Había algo natural, algo muy real, en la transacción que hasta el momento desconocía. Si no hacía pan, no ganaría dinero y no tendría un sueldo, pero si lo hacía y era bueno lograría que la gente volviera. De repente en la pequeña panadería todo parecía posible, muy posible.»

Y así con esas ganas que nos salen cuando hacemos algo que realmente nos gusta, sin importar cuánto trabajo nos lleve, voy a preparar esos palitos de pan aderezados con queso.

Y próximamente veréis los resultados y os pondré la receta para que podáis realizarlos.

Blog · relatos · reseña de libros

La pequeña panadería de la isla.

Y de nuevo una historia entrañable, para ilusionarnos, reírnos, esperanzarnos y bueno alguna que otra lagrimilla también. Nos manda un mensaje positivo de superación.

HAZ LO QUE REALMENTE TE HACE FELIZ A TI, Y NO LO QUE DICTAN DEBERÍAS HACER.

Muchas veces nos empeñamos en cosas que no funcionan hasta quedar sin fuerzas para levantarnos. Ponemos nuestro enfoque en cosas que en realidad no son necesarias y sin embargo pasamos por alto otras tantas que si lo son y mucho.

Esta novela «La pequeña panadería de la isla», es para leerla sobre todo en esos momentos bajos que solemos tener (si no los tenemos muchísimo mejor). Seguro que en algunos de sus párrafos os sentiréis identificad@s.

Su autora Jenny Colgan, como ya os comente en otro de sus títulos (Encuéntrame en el Cupcake café) es una escritora de comedia y ciencia ficción. Y desde luego me encanta lo que he leído de ella, será porque toca temas como la cocina y claro ante eso me rindo si o si, y de la misma manera porque sus libros me dejan muy buen sabor de boca y me animan muchísimo.


Polly Waterford, creía que tenía su vida encaminada, un chico estupendo a su lado (con el que en un futuro formar una familia), un negocio que han montado juntos el cual esperan que vaya viento en popa. Un lujoso apartamento que han comprado en una de las mejores zonas de la ciudad, fiestas y cenas caras donde pretenden atraer clientes, todo eso que pinta fenomenal, se ve ensombrecido, las nuevas tecnologías se abren paso, y todos esos castillos se derrumban. Nada parece salir como pensaron y su relación se rompe.

Polly una luchadora nata, no se rinde y se niega en aceptar la ayuda de su mejor amiga. Su desesperación por encontrar un sitio donde vivir la lleva hasta Mount Polbearne, una isla pequeña con pocos habitantes. Allí recupera su gran afición, hacer pan, este hobby, se convertirá en algo más, también le servirá para conocer a sus habitantes, de lo más variopintos.


Una novela con giros inesperados y  que como ya os dije antes , te deja con una sonrisa en la boca.

La pequeña panaderia de la isla
Reseña de La pequeña panadería de la isla.